El pasado 29 de octubre de 2024, la Comunidad Valenciana sufrió una de las peores DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) o gota fría de toda la vida de su historia reciente. La localidad de Chulilla, ubicada en la comarca de la SERRANÍA, se vio especialmente afectada por las intensas lluvias y las consecuentes inundaciones. Este artículo analizará los daños causados por este fenómeno meteorológico extremo, poniendo el foco en la situación específica de Chulilla y su entorno.
El Impacto de la DANA en Chulilla
La DANA del 29 de octubre provocó en Chulilla daños significativos como carreteras inundadas y problemas de todo tipo. Daños en infraestructuras turísticas y viviendas por las rocas que se desprendieron del monte La MuelaA la altura del balneario el río llegó a superar la primera planta de las construcciones del balneario. la desembocadura del río Sot de chera también han comentado que está destrozada.
El Papel de los Ríos y Barrancos
Los ríos y barrancos de la zona, como el río Sot de Chera, la rambla de Losa y el barranco Vallfiguera, jugaron un papel fundamental en la amplificación de los efectos de la DANA. Estos cursos de agua, normalmente tranquilos, se convirtieron en torrentes desbordados que arrasaron todo a su paso.
Es fundamental analizar los datos de los pluviómetros cercanos a Chulilla para comprender cómo las precipitaciones extremas influyeron en el caudal de estos ríos y barrancos. Más o menos las precipitaciones rondaron los 300 litros en toda la zona con un pico mayor en Chera que llegó a los 400 litros (415 en la presa de Buseo).La cuenca del río Sot de Chera de unos 250 km cuadradosde extensión se vio sometida a una presión hídrica excepcional.
La presa de Buseo desempeñó un papel clave en la regulación del caudal del río Sot de Chera. Sin embargo, las intensas lluvias superaron la capacidad de almacenamiento de la presa, lo que provocó una liberación controlada de agua para evitar el riesgo de rotura. El agua rebasó en dos metros la estructura del embalse provocando una gran subida de las aguas a su paso por el municipio de Sot de Chera que tuvieron que lamentar dos muertos y cuantiosos daños en infraestructuras y viviendas.
A la altura del río en Vilamarxant, situada aguas abajo de Chulilla, sirve como indicador de la magnitud de las inundaciones, alcanzó su máximo caudal a las dos y media de la madrugada con 1.900 m3/s en Vilamarxant, aumentando casi 400 veces por encima del valor normal de 5 m3/s.
Consecuencias a Largo Plazo y Medidas a Adoptar
Las consecuencias de la DANA en Chulilla son múltiples. Además de los daños materiales, este evento ha dejado una profunda huella en la población local. Para hacer frente a situaciones similares en el futuro, es necesario adoptar medidas de prevención y adaptación, como:Mejora de los sistemas de alerta temprana: Implementar sistemas más eficientes para alertar a la población ante posibles inundaciones.
Revisión de los planes de emergencia: Actualizar los planes de emergencia municipales y comarcales para garantizar una respuesta coordinada y eficaz.
Restauración de los ecosistemas fluviales: Recuperar los ecosistemas fluviales degradados para aumentar su capacidad de amortiguación ante eventos extremos.
Fortalecimiento de las infraestructuras: Invertir en la mejora de infraestructuras hidráulicas y de protección civil.
La DANA del 29 de octubre ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de Chulilla y de otras muchas localidades cercanas al río Turia como Bugarra, Gestalgar y Pedralba ante eventos meteorológicos extremos. Es necesario un esfuerzo conjunto de las administraciones públicas, los expertos y la ciudadanía para hacer frente a los desafíos planteados por el aumento de la temperatura del mar que da mucha más gasolina a estos eventos de gota fría y garantizar la seguridad de las poblaciones.
En este video de Dron se puede ver el destrozo realizado entre Sot de Chera y Chera:
Fuente: @EmilioPalacios